En los últimos meses hemos visto como muchos bancos alrededor del mundo están implementando un chip a las tarjetas de crédito y débito, sin embargo, muchos aún se preguntan el por qué y que significa este cambio.

Conociendo la tecnología EMV

La tecnología EMV es utilizada para la inter-operación de tarjetas con circuitos integrados o tarjetas inteligentes, que mejora la autenticación de los pagos y transacciones realizadas con tarjetas de crédito o débito, según la empresa Evertec. Dicha definición, podría traducirse como la integración de una minicomputadora, a las tarjetas con un solo objetivo: Seguridad.

¿Cómo lo hacen? Sencillo. Este chip integrado en la tarjeta, es programado con una gran variedad de algoritmos cifrados, que mejoran el proceso de autenticación con el terminal utilizado (cajero automático o terminales de comercio). Es importante indicar, que cada algoritmo genera un número de identificación único y diferente, reduciendo considerablemente la clonación de tarjetas, caso contrario a las bandas magnéticas.

Asimismo, como ventaja para los comercios, este tipo de tarjetas podrá generar más transacciones de forma rápida y sencilla, permitiéndoles ahorrar en cada gestión realizada. No obstante, no sólo los tarjetahabientes y los comercios se ven beneficiados, sino también, las entidades financieras.

Ventajas

Su ventaja recae en la reducción de reembolsos a clientes estafados, así como la replicación o creación de nuevas tarjetas cada vez que la banda magnética deja de funcionar. Para verificar el éxito de esta nueva evolución, un estudio reciente realizado en la banca europea, menciona que los fraudes se han reducido en un 60% evitando así, desembolsos de dinero no planificados en las entidades financieras.

Si como entidad bancaria aún no ha efectuado el cambio, le recomendamos no pensarlo más. Asesórese de forma adecuada, adapte su sistema con los mejores y gánese la confianza de sus consumidores.